Palestinos en huelga de hambre al borde de la muerte
Carta abierta al Secretario de Estado en el Ministerio de Asuntos Exteriores británico y de la Commonwealth
Sr. Alistair Burt, Secretario de Estado en el Ministerio de Asuntos Exteriores y de la Commonwealth
King Charles Street,
London SW1A 2AH.
Asunto: Mahmoud al Sarsak
Estimado Sr Burt:
Como ministro responsable de Oriente Próximo y el norte de África, la difícil situación por la que atraviesan tanto los palestinos que se encuentran encarcelados sin juicio ni representación legal como la de los que están en huelga de hambre en las cárceles israelíes es sin lugar a dudas motivo de profunda preocupación para usted.
Según la Asociación Nacional de Abogados con base en Nueva York, toda la base de la detención administrativa “ … la lleva a la práctica Israel de forma ilegal”. Citan a Human Rights Watch que afirma: “La idea de que se puede encerrar a cientos de personas en cualquier momento y durante años, a cientos y a miles de personas sin derecho a un proceso debido es fundamentalmente contraria a la legislación de derechos humanos” (Directora Ejecutiva, Heidi Boghosian, carta a la Secretaria de Estado, Hillary Rodham Clinton, 21 de mayo de 2012.)
Una víctima de esta situación es Mahmoud al Sarsak (de 25 años), un futbolista profesional palestino que lleva casi tres años preso sin juicio. Lleva 81 días en huelga de hambre de desesperación.
Bobby Sands, cuya muerte (bajo el último gobierno conservador) y la de sus compañeros será para siempre una cicatriz en la reputación británica en todo el mundo, murió en el día sesenta y seis de su sacrificio supremo por la justicia.
Como ex directivo de los Amigos Conservadores de Israel, que el pasado mes de abril se dirigió a la recepción anual de delegados de esta asociación antes de su comida de bienvenida a nuevo embajador de Israel, Daniel Taub, junto con el Secretario de Exteriores William Hague – un Amigo Conservador de Israel desde los sesenta años -, usted está excepcionalmente situado desde el punto de vista diplomático para hablar con el Embajador y con otras personas relevantes en relación a esta situación trágica e ilegal.
El Reino Unido ha padecido una situación parecida, por lo tanto se encuentra al mismo nivel de juego para actuar.
Además, tanto por ser un apasionado aficionado al fútbol como por haber dirigido una campaña política de su Partido por los derechos y la libertad del soldado israelí Gilad Shalit, pocas personas podrían estar mejor situadas para hablar en defensa de otras encarceladas sin derechos.
Mahmoud Sarsak fue detenido el 22 de julio de 2009 cuando viajaba desde Gaza a Cisjordania para un partido de la Selección Nacional Palestina. Él es uno de los cuatro mil palestinos y palestinas encarcelados arbitrariamente en unas “condiciones atroces”. Su peso ha descendido de sesenta y cinco kilos a cuarenta.
Ayer [6 de junio de 2012] se permitió finalmente a Médicos por los Derechos Humanos (Israel) enviar un médico a evaluar su estado de salud. Su informe expresa un temor extremo tanto por su vida como por la de su compañero en huelga de hambre Akram al Rekhawi, que lleva sesenta días rechazando la comida.
No se ha permitido a la familia del señor Sarsak visitarlo desde que fue detenido y él no puede llamarlos por teléfono.
También están en la cárcel veintisiete parlamentarios y dos ministros palestinos.
Usted debe de conocer la Moción Parlamentaria del 9 de mayo de 2012 defendida por el parlamentario Jeremy Corbyn referente a la detención administrativa en Palestina, que ha sido firmada por parlamentarios de todos los partidos. Cita al distinguido experto en derecho internacional y Relator Especial del ONU para los Territorios Palestinos Ocupados, Richard Falk, que ha “ … pedido a la comunidad internacional que actúe para garantizar que Israel acata el derecho internacional referente a los derechos humanos, que se esta violando actualmente con toda impunidad …”.
Verdaderamente se está acabando el tiempo para quienes están en huelga de hambre, literalmente no hay un segundo que perder. El silencio significa complicidad. El hecho de que el gobierno británico permanezca en silencio y no presione lo convierte efectivamente en partícipe de una pena de muerte y en violador del derecho internacional, incluyendo muchos artículos de la Cuarta Convención de Ginebra.
Por supuesto, Gran Bretaña tienen una profunda responsabilidad en la difícil situación de los palestinos, en su cada vez más disminuido territorio, en su desplazamiento y en la destrucción de sus hogares, de su historia y de sus medios de vida.
Con todo, el antecesor histórico del ministro de Exteriores William Hague, James Balfour, fue (el 2 de noviembre de 1917) específico en un punto: “El gobierno de Su Majestad ve con agrado el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo judío y hará cuanto sea posible para facilitar el logro de este objetivo, entendiéndose claramente que no se hará nada que pueda perjudicar a los derechos religiosos y civiles de las comunidades no judías existentes en Palestina …”.
Durante sesenta años se han ignorado, maltratado, bombardeado y violado todos y cada uno de los derechos de la comunidad no judía, con impunidad y con el silencio del creador de Israel, Gran Bretaña.
Por favor, ministro, no agrave estos errores históricos únicos permaneciendo en silencio, cuando un hombre joven se dispone a morir de desesperación. No hay mejor enviado de la justicia que un diplomático y Amigo de Israel.
Salvar una vida puede costar simplemente una llamada de teléfono.
Atentamente,
Felicity Arbuthnot
Fuente original: http://www.globalresearch.ca/index.php?context=va&aid=31312
Traducido del inglés para Rebelión por Beatriz Morales Bastos.