La Dolce Vita de Yoani Sánchez en Cuba
Contrariamente a lo que afirma, la disidente cubana Yoani Sánchez lleva un tren de vida inaccesible para la inmensa mayoría de los cubanos.
A la lectura del blog de la disidente cubana Yoani Sánchez, uno no puede dejar de sentir empatía por esta mujer joven que expresa abiertamente su oposición al gobierno de La Habana. Describe escenas cotidianas de privaciones y de penurias de todo tipo. “Una de esas escenas recurrentes es la de perseguir los alimentos y otros productos básicos en medio del desabastecimiento crónico de nuestros mercados”, escribe en su blog Generación Y.[1]
De hecho, la imagen que Yoani Sánchez presenta de ella misma –la de una mujer con aspecto frágil que lucha a la vez contra el poder estatal y las dificultades de orden material– está muy lejos de la realidad. En efecto, la figura de proa de la disidencia cubana dispone de un nivel de vida que casi ningún otro cubano de la isla puede permitirse.
Más de 6.000 dólares de ingresos mensuales
La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que agrupa los grandes conglomerados mediáticos privados del continente, decidió nombrarla vicepresidenta regional por Cuba de su Comisión de Libertad de Prensa e Información[2]. Sánchez, de costumbre tan expresiva en su blog, ha mantenido un silencio hermético acerca de su nuevo cargo. Hay una razón para ello: su remuneración. La opositora cubana dispone ahora de un salario de 6.000 dólares mensuales, libres de impuestos. Se trata de un ingreso bastante elevado, habitualmente reservado a los cuadros superiores de las naciones más ricas. La importancia del salario es tanto más manifiesta en cuanto que Yoani Sánchez reside en un país del Tercer Mundo donde el Estado de bienestar está presente y donde la mayoría de los precios de los productos de primera necesidad están fuertemente subvencionados.
En Cuba, existe una doble circulación monetaria: el CUC y el CUP. El CUC representa alrededor de 0,80 dólares y 25 CUP. Así, con su salario de la SIP, Yoani Sánchez dispone de un ingreso equivalente a 4.800 CUC o a 120.000 CUP.
El poder adquisitivo de Yoani Sánchez
Evaluemos ahora el poder adquisitivo de la disidente cubana. Así, con semejante salario, Sánchez puede pagarse, a elección,
-300.000 pasajes de bus,
-6.000 viajes en taxi a través de toda La Habana[3],
-60.000 entradas de cine,
-24.000 entradas de teatro,
-6.000 libros nuevos,
-24.000 meses de alquiler de un apartamento de dos cuartos en La Habana[4],
120.000 vasos de guarapo (jugo de caña),
-12.000 hamburguesas,
-12.000 pizzas,
-9.600 cervezas,
-17.142 paquetes de cigarrillos,
-12.000 kilos de arroz,
-8.000 paquetes de espaguetis,
-10.000 kilos de azúcar,
-24.000 helados de cinco bolas,
-40.000 litros de yogur,
-5.000 kilos de frijoles,
-120.000 litros de leche (si tiene un hijo de menos de 7 años),
-120.000 cafés,
-80.000 huevos,
-60.000 kilos de carne de pollo,
-60.000 kilos de carne de puerco,
-24.000 kilos de plátanos,
-12.000 kilos de naranjas,
-12.000 kilos de cebollas,
-20.000 kilos de tomates,
-24.000 tubos de pasta dental
-24.000 plaquetas de jabón,
-1.333.333 kilowatt/hora de electricidad[5],
-342.857 metros cúbicos de agua potable[6],
-4.800 litros de gasolina,
-un número ilimitado de visitas al médico, dentista, oftalmólogo o cualquier otro especialista de salud, ya que estos servicios son gratuitos.
-un número ilimitado de inscripciones a un curso de deporte, de teatro, de música u otro (también gratuitos).
Estas cifras ilustran el verdadero nivel de vida de Yoani Sánchez en Cuba y arrojan una sombra sobre la credibilidad de la opositora cubana. Al salario de 6.000 dólares que le otorga la SIP, conviene agregar el ingreso que cobra cada mes del diario español El País, del cual es corresponsal en Cuba, así como las sumas cosechadas desde 2007. En efecto, en el espacio de unos años, Sánchez recibió múltiples distinciones, todas financieramente remuneradas. En total, la bloguera ha recibido una retribución total de 250.000 euros, o sea 312.500 CUC o 7.812.500 CUP, es decir un importe equivalente a más de 20 años de salario mínimo en un país como Francia, quinta potencia mundial.
La disidente, que primero emigró a Suiza antes de elegir regresar a Cuba, es lo bastante sagaz como para comprender que el hecho de adoptar un discurso a favor de un cambio de régimen agradaría a poderosos intereses contrarios al gobierno y al sistema cubanos. Éstos, a su vez, sabrían mostrarse generosos con ella y le permitirían gozar de la dolce vita en Cuba.
Salim Lamrani
Doctor en Estudios Ibéricos y Latinoamericanos de la Universidad Paris Sorbonne-Paris IV, Salim Lamrani es profesor titular de la Universidad de la Reunión y periodista, especialista de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos. Su último libro se titula Etat de siège. Les sanctions économiques des Etats-Unis contre Cuba, París, Ediciones Estrella, 2011, con un prólogo de Wayne S. Smith y un prefacio de Paul Estrade.
Contacto: [email protected] ; [email protected]
Página Facebook: https://www.facebook.com/SalimLamraniOfficiel
[1] Yoani Sánchez, «Mayorista vs minorista», Generación Y, 5 de junio de 2012. http://www.desdecuba.com/generaciony/ (sitio consultado el 26 de julio de 2012).
[2] El Nuevo Herald, «Nombran a Yoani en Comisión de la SIP», 9 de noviembre de 2012.
[3] De La Habana Vieja hasta Playa.
[4] El 85% de los cubanos son propietarios de sus viviendas. Esta tarifa se reserva exclusivamente para los ciudadanos cubanos de la isla.
[5] 0,09 CUP/ kilowatt/hora hasta 100 kilowatt/hora.
[6] 0,35 CUP/m3.